El 8 de junio de 2011 se celebró por primera vez el Día Mundial de IPv6 y, ese mismo día, más de 400 empresas realizaron una prueba técnica para el despliegue de la nueva versión del Protocolo de Internet.
La propuesta fue organizada por la Internet Society (ISOC) con el fin de realizar una prueba de implementación de IPv6 a escala global y evaluar el estado de la infraestructura de sitios web, ISPs, proveedores de software, sistemas operativos y organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, entre otros.
Las direcciones del Protocolo de Internet (IP) son identificadores numéricos únicos asignados a todo lo que está conectado a Internet, desde servidores web hasta smartphones, cámaras e impresoras. La versión más usada del Protocolo de Internet, IPv4, se desarrolló a principios de los años 80 y ha estado al servicio de la comunidad global de Internet por más de tres décadas. Pero hoy se encuentra en su fase final de agotamiento: ya hay casi tantos usuarios de internet como direcciones IPv4, y el total de dispositivos conectados ya supera cinco veces ese límite.
Además de arrojar datos estadísticos, también sirvió como puntapié para motivar a la comunidad internacional a estar preparados para la migración, asegurando una transición exitosa. Así, por primera vez y solo durante 24 horas se habilitó la nueva versión del protocolo en los principales sitios web del mundo.
Si bien los resultados fueron alentadores, el consenso general fue que todavía faltaba trabajo por hacer. Recién al año siguiente, el 6 de junio de 2012, tuvo lugar el Lanzamiento Mundial de IPv6, donde todos los participantes del año anterior, y muchos más, habilitaron la nueva versión pero esta vez de forma permanente.
Hoy en día, 7 años después, aún queda un largo camino para recorrer en la transición de IPv4 a IPv6. Solo el 27% de los sitios que integran el ranking top 1000 de Alexa son accesibles mediante el nuevo protocolo, y en el caso de nuestro país, apenas hay un 6,75% de penetración de IPv6 nativo a junio de 2018.
Hoy en día muchos dispositivos comparten la misma dirección IPv4, generando un embudo que puede traer varias tipos de problemas. Al poder darle una dirección única a cada computadora, teléfono móvil o electrodoméstico mediante IPv6, la comunicación entre ellos se vuelve menos compleja, favoreciendo al desarrollo de nuevas tecnologías y el crecimiento de Internet en su totalidad.
Es claro que la adopción de esta nueva versión todavía tiene un largo camino por recorrer. Por este motivo, es necesario tomar este día para recordar que a partir de un trabajo colectivo entre los distintos sectores que hacen a la comunidad de Internet se podrá poner en marcha la actualización del protocolo en Argentina.
En argentina la Coalición IPv6 impulsa un trabajo colectivo entre el Estado y organismos de sectores privado, técnico, académico y civil para promover e incentivar la transición del protocolo IPv4 a la nueva versión. Esta iniciativa, creada bajo la órbita de la Secretaria de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, apuesta a una estrategia de trabajo colaborativo junto a NIC Argentina, ENACOM y la ONTI, y se espera la participación de otras entidades.
Fuente: NIC Argentina.